Chiclayo, Perú. La tumba del sacerdote-guerrero descubierta en el complejo arqueológico de Huaca Rajada-Sipán, en el distrito de Zaña (Lambayeque), correspondería a un entierro de la fase Moche Temprano que habría dado origen a la dinastía Sipán hace más de dos mil años.
Así lo dio a conocer el arqueólogo Luis Chero Zurita, responsable del Proyecto Arqueológico Sipán-Huaca Rajada, quien indicó que dicho entierro fue descubierto en agosto pasado en esta localidad del norte del país.
Tras el descubrimiento de la denominada tumba 15 en el complejo de Sipán se han realizado investigaciones científicas y ahora se puede determinar que este personaje corresponde al entierro de un joven noble mochica de 21 años.
El entierro expone ornamentos como una corona con la figura de un búho, dos narigueras en cada mano, una punta de porra, pequeños cascabeles de cobre dorado, así como pectorales y brazaletes confeccionados de conchas marinas o spondylus.
Chero refirió que durante las excavaciones, a doce metros de profundidad, también se encontraron dos ceramios de forma de búho con gollete y borde, que tienen mucha relación con su religiosidad y vínculo con el período Moche Temprano o Moche I.
"Corresponderían al siglo I de nuestra era, por lo que se define que sería una tumba fundacional y el inicio de la plataforma funeraria, habrían más tumbas que corresponden a este período cultural", destacó.Así lo dio a conocer el arqueólogo Luis Chero Zurita, responsable del Proyecto Arqueológico Sipán-Huaca Rajada, quien indicó que dicho entierro fue descubierto en agosto pasado en esta localidad del norte del país.
Tras el descubrimiento de la denominada tumba 15 en el complejo de Sipán se han realizado investigaciones científicas y ahora se puede determinar que este personaje corresponde al entierro de un joven noble mochica de 21 años.
El entierro expone ornamentos como una corona con la figura de un búho, dos narigueras en cada mano, una punta de porra, pequeños cascabeles de cobre dorado, así como pectorales y brazaletes confeccionados de conchas marinas o spondylus.
Chero refirió que durante las excavaciones, a doce metros de profundidad, también se encontraron dos ceramios de forma de búho con gollete y borde, que tienen mucha relación con su religiosidad y vínculo con el período Moche Temprano o Moche I.
Los ocho ornamentos de rango y mando del sacerdote-guerrero de la zona funeraria de Huaca Rajada-Sipán fueron presentados por el director de la Unidad Ejecutora Naylamp, Celso Sialer Távara; y el arqueólogo Luis Chero Zurita, responsable del proyecto de investigación.
Los especialistas indicaron que los restos serán traslados a los laboratorios del museo de sitio del complejo arqueológico para su conservación y restauración. Sialer Távara señaló que las excavaciones estuvieron a punto de paralizarse, pero gracias a las gestiones realizadas por el presidente del Consejo de Ministros, Javier Velásquez Quesquén, se pudo conseguir una partida de 250 mil nuevos soles para la zona de Huaca Rajada-Sipán.
"Estas labores continuarán hasta diciembre y los arqueólogos podrán hacer sorprendentes hallazgos", remarcó.
Destacó que con el presupuesto económico se financiarán los análisis de las osamentas para determinar, a través de su ADN, su vínculo familiar con el Señor de Sipán.
"Con las muestras de carbono 14 se determinará su cronología, estas se realizarán en laboratorios de Estados Unidos”, apuntó. (Andina).